Literario

jueves, 29 de diciembre de 2011



Alma Blanca

                         Vestida como la espuma
                         de cofia con delantal
                         zapatos como la nieve
                         alma blanca como cristal.

                        Navegas entre gemidos
                        ojos de triste mirad
                        seres que están rendidos,
                        hermanos que anhelan tu caridad.

                       Agil y silenciosa
                       incansable como la mar
                       entibias el frio lecho 
                       de dolor y enfermedad.

                      Viandas entre tus manos
                      sonrisas, serenidad
                      tabletas multicolores
                      en bandeja de eternidad.

                     Vestida como la espuma
                     de cofia con delantal
                     zapatos como la nieve
                     alma blanca como cristal...

                                Dr. Nicolás Avilés González

        ¡Feliz día de la enfermera hoy y siempre!


miércoles, 14 de diciembre de 2011



Que Dios permita que éstas fiestas navideñas sean un cúmulo de alegrías y que les llene de salud, de felicidad y que también les ayude a cumplir sus anhelos. Les desea Nicolás Avilés González desde Culiacán, Sinaloa, México; Tierra de las mujeres bonitas.

                                       avilesgn@hotmail.com

viernes, 9 de diciembre de 2011

                                  Barda entre México y Estados Unidos


EL SUEÑO AMERICANO NO SIEMPRE RESULTA THE AMERICAN DREAM

La migración es un fenómeno que aparece con el hombre mismo o sea que su origen se pierde en lo obscuro de los tiempos. Los motivos son diversos: ansias de aventura, necesidad intrínseca de conocer nuevos horizontes, amenazas, guerras intestinas, persecuciones, miedo y por último la necesidad de mejorar las condiciones de vida para uno mismo y para la familia.
Cada uno de nosotros, los que hemos dejado alguna vez de manera temporal o definitiva nuestros lugares de origen sabemos cuales fueron esos motivos. Y son muy intimos y respetables. Pero algo me dice que muchos lo hicieron para buscar mejores condiciones de vida que su comunidad y su país no pudo otorgarles.
El modelo económico neoliberal implantado en México y en la mayoría de los países latino americanos ha rendido sus frutos y actualmente el 46.3% o sea 52 millones de mexicanos vivimos hoy en situación de pobreza. Lo que sugiere que el dinero de muchos lo tienen unos cuantos. En suma, las ganancias salariales no superan los 16, 000.00 pesos. Expresado en dolares no pasa de mil docientos al año (Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares ENEGI, 2008). Y si restamos los índices inflacionarios, tendremos una capacidad de compra paupérrima que no aseguraran una vida digna, Los ingresos son escasamente suficientes para satisfactores primarios, la diversión y el esparcimiento están vedados para la mayoría de los mexicanos. De aquí que me lleve a pensar que lo anterior es el motor principal de la migración.
El país vecino del norte, los Estados Unidos de América es el que más migrantes recibe, esto por dos motivos; la cercanía, son pocos los que se van a la comunidad europea y solo tengo registrado el caso de Martín Morachis que dejo su Costa Rica en Culiacán, Sinaloa para vivir en el oriente, específicamente Tokio en el Japón. O sea que son los más los que buscan el American Dream ( 95% de los migrantes elige algún lugar en la unión americana; López Villar y Cols, 2004).

En uno de los pocos viajes que he hecho por tierra hacia la ciudad fronteriza de Tijuana en el estado de Baja California llegamos a un reten de los muchos que instaló el gobierno federal desde la comunidad El Carrizo en Sinaloa hasta la frontera. Son muchos y, en uno de tantos nos detuvieron para buscar armas y/o estupefacientes.
-Bajense por favor- Nos ordenó una voz imperativa que lanzaba un soldado que estaba parado junto al chofer en  el frente del camión. El puesto donde nos encontrábamos estaba en un punto inespecifico del árido estado de Sonora, era a media mañana cuando lo hicimos.
La gente se arremolinó tratando de alcanzar la puerta de camión y así cumplir con el mandato. Hice lo mismo, caminé hacia el exterior del vehículo y al estar en el suelo  recibí un golpe del agobiante calor que hacía esa mañana de julio. El vaho del desierto envolvió todo mi cuerpo. Me estremecí, sin embargo rápidamente traté de asimilarlo, enseguida sentí deseos de vaciar mi vejiga y fui al baño, al salir de aquel espacio reducido habilitado para estas necesidades pude distinguir un cerco de púas frente de mi, que por cierto tenía tramos sin alambre. Era el límite al norte de nuestro país, ahí se terminaba Sonora e iniciaba Arizona, tan sólo un cerco destruido constituía la división, la frontera entre los dos países.
La tenía al alcance de mi mano, no pude resistir alcanzarlo y me dirigí hacia ella, quería tener la sensación extraña de hacer algo indebido, de violentar las leyes binacionales y me dirigí hacia allá. Desde donde me encontraba hacia el suelo extranjero había unos  ciento cincuenta o docientos metros. Durante el recorrido desde el baño a la "línea" me percaté del esfuerzo muscular que representaba avanzar sobre un terreno flojo, arenoso, en el que a cada paso se hundían mis zapatos, daba la impresión de que el suelo huía de las plantas de mis pies. Como si de alguna manera quisiera recordarme que aventurarse por esos parajes no sería nada fácil. El esfuerzo era supremo, el desgaste era mayúsculo dado lo difícil del terreno y los caliente de los rayos del sol que caían a plomo sobre el desnudo cuero cabelludo de mi  cabeza. Estábamos a unos cuarenta y cinco grados Celcius.
Por el esfuerzo, pronto mi cara se perló de sudor, sentí mi boca seca, sin embargo no eran limitantes para vivir la experiencia de brincar el alambre, de entrar de ilegal a los Estados Unidos. En un santiamén estaba en el "Otro lado", avance unos metros y estuvé en una brecha de terracería que corría o corre paralela a la "Linea". Claramente miré las marcas de los vehículos con los que hace sus recorridos la "Migra" intentando siempre detener el paso de indocumentados. En esos momentos estos vigilantes no estaban, había silencio, matorrales, sahuaros, arena, mucha arena caliente bajo mis pies y a los lejos en el horizonte se distinguían algunas montañas desnudas por efecto de los vientos que por millones de años las azota por todas sus caras, y por lo escaso de las lluvias en esos lugares. En páramo impresionaba, atemorizaba
Ya, de nuevo en el autobús disfruté del clima artificial, me sentía cansado, agobiado por el esfuerzo y por el sol rabioso del desierto, poco a poco me fui calmando y mientras eso sucedía, el camión avanzaba, a los lados de la carretera siempre arena, chamizos y sahuaros.









Poco después me invadió la imagen de Luis, un lugareño moreno, menudito de pelo negro y bigote ralo, nacido en las estribaciones de la sierra madre occidental, en el Ranchito de los Burgos, muy cerca de El Salado, Culiacán, Sinaloa. El relato de su experiencia de la primera vez en que intentó y logró pasar al "Otro lado" me retumbaba en mis oídos, sus palabras no me abandonaban ese día caluroso de verano en el Estado de Sonora. Recordé los siguiente:
-Doctor Avilés, no se realmente como salí vivo de la caminata que realicé la primera vez que me fui de "alambre", tan sólo recuerdo que entré por Tecate BC. caminaba y caminaba y no llegaba a ningún lado, los chorros de sudor me mojaban todo el cuerpo, la sed estaba conmigo todo el tiempo, se me engarrotaban las piernas de tanto caminar y me dolían mucho las plantas de mis pies. El plástico donde llevaba el agua me pesaban más cada vez que me alejaba de la frontera y, con espanto veía como se me iba terminando el agua. Lejos, muy lejos se miraban los cerros que dado el cansancio y la sed se me afiguraba que veía la cara de la muerte. Era la primera vez que pasaba y no podía fallar. Mi familia me necesitaba.
Los riñones de Luis, lo ayudaron a sobrevivir, con la falta de ingesta de líquidos se corta la orina con objeto de conservar el volumen en el interior de los tejidos. El hígado inunda el torrente sanguíneo con sus reservas energéticas para alimentar los músculos que luchaban para trasladar la humanidad del migrante a buen puerto. Cuando ambos sistemas fallan sobreviene la muerte.

- Mire doctor, con el esfuerzo empecé a mirar que había agua a los lejos y me apuraba para tomar y llenar los recipientes, me animaba, pero después me daba cuenta de que no había nada, también pensaba que estaba cerca de algún pueblo o de alguna ciudad, en mi interior me decía " ya la hiciste", sin embargo todo era ilusión , todo era mentira, me engañaban mis ojos, me decía tienes que llegar Luis, tienes que hacerla Luis. Se me figuraba mi casa, mi esposa, mis hijos y el Ranchito de los Burgos que dos días atrás  había dejado a mis viejos

La falta de fluidos en el cerebro de Luis hacía estragos, se estaban produciendo confusión, ilusiones ópticos, sin embargo la ilusión lo llevada adelante. Esperaba que no le jugaran una mala broma las serpientes de cascabel o los monstruos de Gila que abundan en el desierto y son otra de las amenazas de los migrantes en transito.

-Mi iba mareando, me quedaba poca agua y alimentos, después de tres día de marcha llegamos a un sitio donde nos esperaba una troca que manejaban otros "polleros", di gracias al cielo de no morir, enseguida enfilamos hacia Los Ángeles, después mandé por mi familia y desde entonces acá estamos.

El American Dream representa el éxito en los Estados Unidos ¿Y, qué es el éxito? Ah, dirán algunos; es acceso a espectáculos de alfombra roja, calzado, ropa  de moda caras, casas de ensueño, joyas, autos de superlujo, viajes y mujeres caras. ¿Cuántos logran el Glamour?, ¿En cuantos el American Dream se convierte en pesadilla?- No se me olvida lo que me dijo al despedirse aquella tarde en mi consultorio-
-Doctor Avilés, al principio duré diez años para volver al Ranchito de los Burgos, no podía venir ya que no tenía papeles, pero ahora ya arreglé, ya puedo ir y venir a México, puedo pasar por la garita, pero ahora que estoy derecho no tengo tiempo y a pasar de que me mato  en la chamba todo el día, tampoco me queda suficiente dinero, así es que vengo poco a ver a mi'pa y cada vez lo miro viejo, cada vez lo veo más acabado...

                            Dr. Nicolás Avilés González.
                                avilesgn@hotmail.com


lunes, 5 de diciembre de 2011

lunes, 28 de noviembre de 2011

El Padre Jeringas


                                                                       El Padre Jeringas

El verano calaba  aquella noche de trajín intenso en el servicio de urgencias del Hospital General de Zona No. 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Culiacán, Sinaloa, México, las ambulancias no dejaban de aular entregando su delicada carga de dolientes. Hombres y mujeres se arremolinaban alrededor del puesto de control buscando ser atendidos por el médico de guardia. Las camas de hospitalización repletas, el servicio estaba realmente saturado. Las enfermeras no cesaban su vaivén; los pasantes se encontraban ocupados todos. No había señales de descanso para nadie en todo el turno. En esa vorágine, allá a las altas horas de la noche hace presencia un hombre de estatura mediana, complexión regular, tez blanca, pelo negro, enfundado en habitos de sacerdote católico. En su mano derecha portaba un maletín de piel color negro, pero dado su constante uso mostraba abundantes zonas decoloradas. Pronto estubo cerca de mí, sin ambages me interrogó sobre el estado de salud que guardaban los pacientes que estaban internados, enseguida remarcó su interés por los más graves.
Dudé en darle la información, no es costumbre proporcionarla al menos que el solicitante sea familiar directo, se notaba que el señor que me la solicitó nada tenía que ver con alguno de ellos, con recelo pregunté sobre el objeto de su presencia en nuestra área de trabajo, quizá me notó molesto por lo que respondió de inmediato -Soy el padre Héctor Orozco y mi función es asistir a  enfermos en su lecho de dolor, especialmente aquellos que estén graves, entendí y enseguida le dí el número de las camas que correspondían a los más enfermos en aquella noche de agosto. El lugar parecía un horno ya que  no funcionaba la climatización artificial por lo que el calor realmente sofocaba y por otro teníamos abundante trabajo.
Al recibir la ubicación de las camas, enseguida se apresuró en su busca y, así uno a uno los fue visitando, se detenía un tiempo corto, pronunciaba una oración inenteligible dado que la hablaba casi sin separar sus dientes incisivos, momentos después colocaba un escapulario en alguna de sus muñecas y pasaba a otra cama y se repetía el ritual. Cuando ya los había visitado se despedía e iba a otras salas en busca de otros. Esa noche dado lo intenso del trabajo no lo miré regresar desde el interior del hospital.
Después de esta coincidencia su figura encorvada con el maletín viejo en su mano derecha, su hábito blanco y  la estola púrpura que portaba cruzándole el  cuello se me hicieron familiares; lo mismo ¿Dónde están los enfermos más graves? enseguida, raudo se encaminaba hacia los cubículos, pronunciaba sus rezos y, sabía que los había visitado dado el escapulario que les colocaba en su muñeca derecha.
En ocasiones no le era posible acercarse a los pacientes dado su calidad de aislados, eso no le impedía cumplir su objetivo ya que desde las puertas de las salas murmuraba oraciones, enseguida tomaba agua del grifo con una jeringa; la bendecía y desde ahí se las arrojaba sobre los cuerpos. Lo anterior era frecuente en niños en peligro de morir.  Desde luego que estos no estaban bautizados, él, sin permiso de los padres lo hacía con el agua contenida en el dispositivo  cumpliendo así con el mandamiento de la Iglesia; de aquí el mote de "Padre Jeringas".
Desde principios de la década de los años ochentas, lo he visto caminar de hospital en hospital, noche tras noche llevando al límite su capacidad física para cumplir con su apostolado; salvar almas de parecer en el lago del fuego eterno, según él, fallecer sin asistencia espiritual, se muere en pecado y su destino, morar en el lago de lumbre que se encuentra en el centro del Infierno.
Dado lo noble y lo constante de sus acciones se han elevado leyendas con respecto a su persona y hacia su actividad, hay algunos que lo quieren ver como santo, dicen que tiene el poder de la sanación; aquí le comparto uno de sus milagros; Don Fernando Valenzuela, un vecino de esta ciudad portador de asma bronquial; padecimiento crónico que de manera súbita se agudiza provocando sofocación intensa y muchas de las veces  el paciente necesita la aplicación de sustancias intravenosas, oxigenación y nebulizaciones con broncodilatadores para su recuperación. En uno de tantos episodios, ahí estaba Don Fernando y hasta él llegó el padre; al paciente no le pareció adecuada la visita, inmediatamente pensó que estaba en artículo de muerte, que la presencia del sacerdote representaba la santa unción, en ese momento lo rechazó lanzándole  palabras altisonantes hacia su persona  y de manera enérgica ordenó a la enfermera que le retirara las líneas que descargaban líquidos dentro de sus venas, ya sin ellas se marchó no sin dificultad rumbo a su casa, argumentó que si le tocaba morir que mejor fuera en su cama, no murió, pero tampoco ha regresado al servicio de emergencias, ahora en tono socarrón comenta -Me curó el padre jeringas
El sacerdote acepta de manera tácita su don, ya que cuando se le pregunta si lo tiene, contesta -Yo curo a través del poder de mi padre Dios- dejando el resto a la imaginación y la fé de la gente. Otra situación que se dice que tiene, es el don de la bilocación, también aquí no afirma, ni rechaza que lo posee, sólo se concreta a decir -Dice la gente que me ve en dos lugares a la vez- abonando a la leyenda que se ha construido  alrededor de su persona.
 Ya no  tenemos el vestido blanco de Lupita la Novia de Culiacán,  hoy queda la sotana del párroco que nos  sigue iluminando, pero incluso, cuando él ya no esté en nuestras calles, seguramente seguirán los brillos de ambos desde el cielo; ya que seres de luz como Lupita y el padre  se quedarán por siempre entre nosotros ¡Sigue bendiciéndonos padre jeringas!

                                               Dr. Nicolás Avilés González

jueves, 17 de noviembre de 2011


Chinto Mentiras


¡Cuentame la última Chinto!
Así gritaba un hombre al que por la calle lodosa caminaba como si tuviese prisa.
-¡Dime la última Chinto!. Insistía el que con el torso desnudo desafiaba el calor inclemente de septiembre bajo la sombra de una gran pinguica. Como no lograba lo que quería le llama de nuevo
-¿Pero hombre, por qué tan de prisa?- Gritaba con la clara intención de que el que caminaba zigzagueando por la calle resbalosa, tratando de no caer en los charcos rebosantes que había dejado la copiosa lluvia que hacia minutos había terminado de caer, se detuviera. Quería que le relatara alguna de las muchas anécdotas que tenía Chinto para contar. El aludido sólo disminuyó un poco el paso al tiempo que giraba pausadamente su tez morena y con los dedos de su mano derecha elevó de manera discreta el ala de su sombrero de lona blanco y enseguida agregó
-No hombre, no puedo contarte nada en este momento voy de prisa- El de la pinguica, sorprendido por la respuesta intentó saber el motivo de la premura
-¿Que sucede, cual el motivo de ir tan rápido para el Seguro?
El moreno, después de escucharlo sonrió, lo hizo de manera discreta, aunque llevaba buena dosis de picardía ya que esta tenía de sobra y agregó.
-Sabes lo ordinario que son los plebes- Hasta ahí se la dejó, espero que el bichi le hiciera otra pregunta, intuía lo que vendría, sabía que el de la pinguica mordería el anzuelo o que quedaría atrapado en su propia red y así fue.
-Si son muy ordinarios los chámacos. Lo afirmó, dándole la señal a Chinto de que estaba influido y enseguida otra- ¿Que le pasó a tu plebe?- No había dudas, enseguida, la mirada de Chinto se tornó más picara que de costumbre y contestó- ¡Donde vas a creer, desde temprano tienen internado al más chico, este el motivo del apuro!- No añadió más y espero que el bichi solicitara ampliación de motivos y lo hizo- ¿Que tiene tu hijo, por qué está internado?- La pregunta llevaba toda la ingenuidad que en aquel cuerpo escurrido cabía. Esto era lo que esperaba el mentiroso- Pues que crees, este recabrón se tragó ésta mañana un peso Morelos de plata- Sin preámbulos, sin defensa, envuelto totalmente en el influjo mágico de Chinto, replicó-¿Se le atoró en el galillo?- A Chinto no le quedó duda alguna de que el bichi estaba enredado en su propio estambre y le completó- ¡No, no tiene el peso en la garganta, el problema real es que en lo que va del día sólo ha arrojado dos veintes y un diez!
-¡Cincuenta centavos!- dijó sorprendido el ingenuo- a lo que contestó Chinto- Si solamente cincuenta centavos, me dicen los médicos del Seguro que si no arroja el otro tostón me lo van a operar ya que tiene el riesgo de que le pegue peritonitis.
-Ahora comprendo el motivo de tu apuro, creo que es muy grave el asunto de tu plebe. después de decir lo anterior lo conmina a que apresure el paso de nuevo de la manera siguiente- No te detengas, discúlpame que te embromé, otro día me cuentas la última mentira, estoy apenado por haberte entretenido, picale pá'l Seguro amigo-
El rostro del ingenioso se llenó de alegría, pero para no romper el influjo logrado contuvo la sonrisa que amenazaba con abandonarlo, la detuvo apretando las hileras de sus dientes blancos e inmediatamente aceleró el paso dejando sumergido en un  mar de dudas al de la pinguica y se perdió al fondo por la calle lodosa. Con esta chispa de picardía producto del ingenio que le fluía por todos los poros de su piel, este moreno a causa del intenso sol del campo deslumbró a todos los de Costa Rica, Sinaloa, con esa genialidad quiero recordarlo y, estoy seguro que muchos en el pueblo guardan más de una de Chinto Mentiras.

                            Dr. Nicolás Avilés González


miércoles, 9 de noviembre de 2011

Eloisa y Miguel Pimienta

                                        Eloísa y Miguel Pimienta

De las lunas, la de octubre es más hermosa,
porque en ella se refleja la quietud de
dos almas que han querido ser dichosas
al arrullo de su tierna juventud.
Corazón que has sentido el placer en las noches de octubre...


La letra de esta linda melodía propia del cancionero popular mexicano no dejaba de sonar en la mente de aquella joven piel canela, ojos color de mar y pelo azabache, el ambiente era propicio y encantador, no calor que casi siempre se siente en este Estado, hoy no ruborizaba, arriba el cielo lucía una luna plena que bañaba de plata la campiña sinaloense. Era el mes de octubre, el de las lunas bonitas. La noche era embriagadora e invitaba a la pasión. Eloísa se acompañaba de un joven labrador que hacía tiempo le robaba el sueño, la oportunidad era única, paseaban a la vera del río y los arrullaba el canto perenne del Baluarte; agua que de momento se volvía brisa, que luego era arrastrada por el viento suave que bajaba de las montañas y acariciaba sus caras juveniles. La pareja se hallaba embelesada, temblaban ante el contacto de sus pieles y ante el roce de sus labios. Era su primera cita de amor, ella, contagiada por lo bello del momento comentó a Miguel sus pensamientos de la manera siguiente- El embrujo de ésta noche me hace que me trasporte lejos... Me veo junto a tí remando en una barca en la inmensidad de la mar- Miguel la escuchó con atención, pero no dijo nada acerca de lo vertido por la jóven, era un hombre poco expresivo, como son los curtidos por las faenas del campo. El murmullo del agua y del viento no cesaban de amenizar la soledad, ante la actitud del joven, ella insiste con una pregunta que enseguida hace al de tez blanca, facciones finas, ojos de miel y pelo dorado- ¿Para qué te gusta la noche Miguel?, esperaba, desde luego una respuesta llena de poesía y plena de pasión acorde al instante,  sin embargo el hombre contestó parco y de bucólica manera-Para cortar hoja de maíz Eloísa, ya sabes que de día hace un calorón de la chingada- Al escuchar, Eloisa rompió con el influjo que había invadido su silueta esculpida por los dioses, se encogió, las palabras del labrador fueron duras como el sonido cuando rompe una gran  ola en la roca, violento, sacudió sus sentidos, desapareció la ilusión, se le cayeron las alas con las que flotaba y sólo acató a decirle - Llévame a casa- inmediatamente después la pareja desapareció entre el caserío mientras la luna iluminaba de manera esplendorosa el cielo sereno en aquella noche de octubre en El Rosario, Sinaloa.
                
                              Dr. Nicolás Avilés González



lunes, 24 de octubre de 2011

 


Este era un viejito que iba por la bardita, en ese momento un niño le pregunta ¿Hey, viejito por qué andas por la bardita?, el viejito se descuidó y pum que se cae. Y colorín, colorado, este cuento se ha ter-mi-na-do.
ignoro si el cuento les guste, pero ayer a mis hijos y hoy a mi nieto le encanta. Se los comparto
                               

                                                    Dr. Nicolás Avilés González

sábado, 22 de octubre de 2011

                              PUEBLOS MÁGICOS DE SINALOA

   El proyecto federal de pueblos mágicos aparece en el año 2001 como propuesta de la Secretaría de Turismo con el objetivo fundamental de fomentar la afluencia de paseantes a muchas comunidades, que a pesar de tener que mostrar algo sensacional estaban casi en el abandono. Dichos pueblos deberían de poseer una arquitectura urbana basada en edificios construidos en la época colonial hasta el siglo XIX bien preservada. Además que sus espacios tuvieran bellezas naturales a sus alrededores para ofrecer turismo de aventura, una cultura propia que se mostrara en manifestaciones genuinas como danza, música y ceremonias propias de la región.
Se buscaba que el lugar generara un ambiente acogedor, único, mágico, que evocara reminiscencias que pudieran transportar a los visitantes nacionales y extranjeros a un pasado glorioso.
En toda la república hay pueblos que aún conservan  la esencia de esas épocas; el vecino estado de Sonora tenemos a Álamos que nos muestra su gran teatro, recinto oficial del festival estatal de cultura. En Nayarit tenemos a la isla de mexcaltitán, lugar legendario donde se supone salieron los aztecas a fundar Tenochtitlán; San Luis Potosí con su misterioso Real de Catorce que fue abandonado al agotarse la producción de metales preciosos, pero desde tiempos inmemoriales representa la ruta del huichol en sus ceremonias sagradas. El estado de Jalisco no podía dejar de aportar estas joyas y para muestra Tequila, Tapalpa y siguiendo en el occidente la legendaria Cómala de Juan Rulfo en el estado de Colima y viajando hacia el bajío, Querétaro aporta el pueblo de Bernal donde el atractivo principal es la energía que emana su montaña. Guanajuato tiene para visitar Dolores Hidalgo donde el cura Miguel Hidalgo lanzó su proclama de independencia y no podemos olvidar el precioso pueblo de San Miguel de Allende; el el estado de Hidalgo, en la ruta de la montaña encontramos los Prismas Basálticos y la hacienda de San Miguel Regla y el mineral de El Chico; en Chiapas tenemos para el turismo nacional y mundial al precioso San Cristóbal de las Casas, lugar donde se juntan las diversas etnias de las comunidades que lo circundan, en un día de tianguis encontramos tzotziles, tzentales, tojolobanes, lacandones, dándonos un festín multicolor sin par; en Veracruz sobresale la tierra del músico poeta Agustín Lara, Tlacotalpan a la vera del río Papaloapan.

Calle típica de Cosalá

La tierra de la tambora también tiene lo suyo, así enclava en las estribaciones de la sierra madre muy cerca de los límites con el estado de Rango tenemos a Cosalá que aún hasta estas fechas le siguen estrayendo metales preciosos los hombres de la tierra y, queda el recuerdo de otros minerales ya extintos que alguna vez aportaron sus riquezas a la nación como Nuestra Señora y Guadalupe de los Reyes, pueblo, este último que muestra su auge a través de las construcciones majestuosas y su iglesia monumental. Hoy abandonadas casi en su totalidad.
la cabecera municipal de Cosalá con sus retorcidas callejuelas cubiertas con piedra bola del río invita a su pasado colonial, piedra que hace que los herrajes de cascos de las bestias de carga al caminar nos produzca un sentimiento especial. Sus edificaciones portentosas como el "Museo del Mineral" protegido por paredes de un metro de espesor son simplemente impresionantes. Frente al museo tenemos la catedral de Santa Úrsula, enclavada en el corazón del pueblo que le da un distintivo señorial.
Entre sus callejones corren leyendas, relatos que parecen salir desde el adobe con lo que están construidas la mayoría de su caserío, nos cuentan de, rebelde Tino Nevarez con su movimiento minero, del caudillo Eraclio Bernal, mártir del movimiento pre-revolucionario nacido en el Chaco, San Ignacio, pero que luchó en tierras del mineral de las "once mil virgenes"; y para los que les gusta el ciclismo de montaña y el manejo Off Road el municipio les ofrece la ruta de la presa Comedero que atrapa aguas dell río San Lorenzo. En este cuerpo de agua podrás disfrutar de los deportes acuáticos y con suerte disfrutarás de un buen filete de lobina negra. Aguas abajo se encuentra San José de las Bocas que aporta algo de la historia de la minería regional y además su "agua caliente", que dicen los lugareños que son medicinales y pueden curar el reumatismo. Hoy podemos admirar los socavones de las minas abandonadas.
Para los que gustar observar los vestigios pre-historicos, existen pinturas rupestres no muy lejos de la plazuela que está frente a la catedral, para los aficionados a la música de banda, seguramente a través de algún balcón de sus casonas escucharán la voz del "Trovador del Campo", Luis Pérez Meza, hijo prodigo del mineral. La cascada de Vado Hondo desde luego que refrescará tu cuerpo y sentirás el deleite de sus aguas al caer sobre tu espalda y de darte un chapuzón en sus múltiples fosas. Pero lo más interesante es que encontrarás siempre una sonrisa en los labios de sus habitantes y especialmente de sus hermosas mujeres.


Palacio de gobierno de El Fuerte

En el norte, rumbo a las estribaciones de la sierra madre y colindando con el municipio alteño de Choix, rodeado prácticamente de agua por las presas Josefa Ortiz de Dominguez, la Miguel Hidalgo y muy cerca de aquí la colosal Luis Donaldo Colosio, en honor al malogrado político sonorense de Magdalena de Kino, todas sobre el río Fuerte que viene de las lluvias y deshielos del vecino Estado de Chihuahua. Vasos donde se practica la pesca deportiva y sus aguas calman las sed de miles de hectáreas desde el Carrizo hasta el municipio de Guasave en el centro del estado, llamado a mucha honra el "Granero de México". Pues en este lugar le gustó al capitán español Francisco de Ibarra para fundarlo en 1563, caserío que poco tiempo después fue destruido por los tehuecos, ameritando la construción de una fortificación que resistiera los ataques, por lo que tomo el nombre de "El Fuerte" y en honor a los condes de Montesclaros. Desde entonces se denomina El Fuerte de Montesclaro. Ya emitida la primera constitución por allá en 1824 del México independiente se conformó el Estado de Occidente que abarcaba desde el sur de Arizona, sonora hasta sinaloa, siendo esta villa su capital. Por todo lo anterior conserva el olor a pueblo colonial, y por lo mismo está lleno de leyendas, como la de Alejandro Vega que emigró desde El Fuerte después de que perdió a María de la Luz Gaxiola su compañera y el negocio de la minería se le vino abajo, decidió ir a probar fortuna a la Alta California llevándose con él al niño Diego Vega Gaxiola que tiempo después este migrante sinaloense se convertiría en" El Zorro", un férreo defensor de sus paisanos en las tierras recién despojadas a México por el gobierno americano.
Es también lugar de nacimiento del General Plácido Vega que luchó contra su Alteza Serenísima, Antonio López de Santa Ana y además contra los invasores franceses en 1963 y el no menos importante el hijo de Charay, el recio General Rodolfo Fierro, segundo de a bordo del General Francisco Villa en la División del Norte.


Matachines en El Fuerte

El Fuerte ofrece a sus visitantes las casonas coloniales adornadas con bellos colores mexicanos, los petroglifos del Cerro de la Máscara que datan entre 800 y 2500 años y las sorprendentes danzas; Pascola, Venado y Matachines que bailan los yoremes en las festividades de semana santa. Orgullosamente poseemos dos pueblos mágicos en nuestro estado y esto es para celebrarlo, vamos pues a disfrutarlos ¡ Los invitamos!

Dr. Nicolás Avilés González

sábado, 8 de octubre de 2011


UN MEXICANO EN EL TITANIC

Hasta agosto de 2011 ignoraba que un mexicano fue pasajero en el primer viaje del legendario transatlántico Titanic. Confieso que no había leído algo sobre el particular, ni mucho menos vi la película, pero después del encuentro con Antonio Uruchurtu en la ciudad del sol en el vecino estado de Sonora, me decidí a investigar sobre el particular.
Manuel Uruchurtu Ramírez nació el 17 de junio de 1872 en la ciudad de Hermosillo, curso la instrucción primaria, secundaria y preparatoria, luego se dirigió a la ciudad de los palacios. ingresando a la Real y Pontificia Universidad de México donde lograría su grado de Licenciado en Derecho. Misma institución que posteriormente a través de la lucha de José Vasconcelos y la de muchos mexicanos ilustres lograría su estatus de autónoma, llamándose a partir de entonces: Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Tiempo después nuestro personaje, dada su gran actividad política, militar  (obtuvo el grado de Coronel) y de litigar a favor del Estado Mexicano en su lucha por recuperar el Chamizal en el Paso del Norte, lograría un escaño por su lugar de origen en la cámara de diputados. Cuando fue depuesto el general Porfirio Diaz, héroe de la batalla del 2 de abril contra las tropas invasoras francesas y posteriormente dictador y que  fue retirado del poder por medio de la lucha armada que inició el 20 de noviembre de 1910 y después obligado a salir del país fue acompañado por  Ramón Corral al destierro, ambos partieron en el buque alemán denominado Ypiranga con destino a la Francia para luego instalarse a las riveras del Sena en la ciudad eterna de París; lugar donde ambos pasaron el resto de sus días.
Ramón Corral, gobernador porfirista en el Estado de Sonora, y a la sazón de las muestras de fidelidad con Diaz llegó a ser su vicepresidente, esto sucedió después que este personaje siniestro sofocó el movimiento de los yaquis y apresó y dio muerte al gran caudillo de esta tribu, José María Leyva Pérez, alias "Cajeme", que en su idioma de raíces cahitas significa "el que no bebe". Este político en su afán de despojar de sus tierras a los yoremes  para dárselas a los yoris (feroces), los masacró, y no conforme con eso, cuando estos naturales estaban en paz, los pocos que sobrevivieron a las infames matanzas del ejercito federal los deportó a las haciendas enequeneras en el Estado de Yucatán. Muriendo muchos de esta etnia durante tan larga travesía. Fueron pocos los que después de la caída del dictador pudieron regresar desde las tierras del Faisán y el venado al valle del yaqui.
Una añeja amistad unía al licenciado Uruchurtu con Corral, y éste el motivo que lo llevó hasta la ciudad luz con el fin de asistir a una fiesta que daba el exvicepresidente. Durante su estancia convivió con Guillermo Obregón que conocía con antelación ya que era yerno del nativo de Álamos y además presidente de la Gran Comisión de la cámara de diputados, a la que pertenecía por cuarta ocacion el   aludido.
El legislador por Sonora pernoctaba en una de las habitaciones del hotel "Gran París" cuando recibió la visita de Guillermo y por situaciones no claras aceptó de este el boleto número PC.17601 de primera clase con el que días después abordaría el Titanic para su regreso para América.
Obregón navegaria a Veracruz a bordo de un buque de menor calado, denominado "Francés" o "París", Manuel Uruchurtu tendría el honor de ser un pasajero más en el viaje inaugural del navío más impresionante fabricado hasta esos días, sustituyendo a Guillermo. Situación que seguramente no le dasagradó ya que el 8 de abril de 1912 envió una postal con la foto del Titanic a sus padres, asegurándoles que pasaría a saludarlos y a contarles sus experiencias en dicha travesía, que lo haría  en su paso hacia el centro del país donde radicaba.
El coloso zarpó de Southamton, Inglaterra a las 12.15 hrs del día miércoles 10 de abril de 1912 y con facilidad arrastró sus 269 metros de eslora, 28 de manga y sus 18 de altura. Estaba equipado con todos los adelantos de navegación de la época tanto que los expertos llegaron a declararlo como inhundible. El arranque fue de mal presagio ya que al salir del puerto ingles casi colisiona con el buque "New York" que hacía maniobras en la cercanía, situación de lo demoró por más de una hora su partida. Superado el incidente cruzó el Canal de la Mancha rumbo a Cherburgo, Francia, donde recogería a otros pasajeros; ahí lo esperaba Manuel Uruchurtu.

el 11 de abril de 1912 hizo escala en Queentown, Irlanda donde subió pasajeros a la sala de tercera clase. Luego avanzó a toda maquina hacia Nueva York,propulsado por sus cuatro gigantescos motores y por una turbina que se alimentaba con montañas de carbón de roca que movían sus tres hélices de bronce y con ello desplazaban las 46, 328 toneladas de acero que constituían su estructura, lo hacía a una velocidad de 23 nudos o 43 kilómetros/hora que era un record para la época. Navegó sin contratiempos durante cuatro días y cuando llegaron a las costas de Terranova el vigía Frederick Flit avistó la presencia del peligro que representaba un iceberg que se alzaba treinta metros sobre el nivel del paño del agua y a una distancia de 500 metros por lo que avisó a William Murdoch que a pesar de las maniobras de urgencia terminó rozándolo con el casco de la nave haciéndole una herida de muerte.

A las 2:20 hrs. de la madrugada del día 15 de abril de 1912, se daba la voz de alarma de que las frías aguas del océano estaba entrando a los compartimentos del barco y según el capitán Edward John Smith y sus ingenieros calcularon que tenian dos horas para abandonarlo. El transatlántico llevaba un total de 2224 pasajeros y las balsas de emergencia sólo salvarían a 1778, tendrían que morir 446.
La logística fue rescatar a la brevedad los de primera clase, y por ser miembro del gobierno de México e ir en primera clase a Uruchurtu se le asignó el bote número 11 y cuando hubo completado el cupo no se permitió por razones de seguridad subir a nadie más. En esos momentos el "inhundible" daba muestras de irse a las profundidades de las aguas por lo que nuestro compatriota ya estaba a salvo.

Enseguida, del montón, de manera súbita aparece una mujer relativamente joven con una niña en brazos suplicando a los guardias que se le permitiera subir a dicho bote salvavidas. Estos fueron inflexibles, pero ante la suplica lastimera y de argumentar que las esperaba el papa de la niña en Nueva York, nuestro legislador se conmovió e inmediatamente dio muestras de solidaridad y caballerosidad elevadas hasta las últimas consecuencias, cediéndole su lugar en el bote 11. El sonorense sabía que había firmadó su sentencia de muerte, por lo que pidió a la mujer que le prometiera que iría hasta la casa de sus padres en Hermosillo a contarles sus últimas palabras pronunciadas en vida; era su despedida y además le reiteró que los amaba con toda el alma. Cabe aclarar que en este dato fue confirmado por Antonio Uruchurtu. No la envió a Jalapa con el mensaje a su esposa Gertrudis Caraza y Landeros y a los siete hijos que procreó Manuel con ella como se afirman algunas de las bibliografias revisadas.

después de cederle su lugar, nuestro mexicano regresó al buque que minutos antes ya había dejado; navío que estaba dañado y por lo mismo le quedaba poco para perderse en las aguas gélidas del Atlántico Norte. Seguramente ya en este, se reconforto con las melodiosas notas que entonaba la orquesta que dejo de tocar hasta que murieron ahogados. Nunca se recupero el cuerpo del sonorense. Tiempo después llegaba Guillermo Obregón al puerto Jarocho sano y salvo con el boleto que le correspondía a Uruchurtu. No  cabe duda que el destino está determinado por un poder superior.

Horas después del naufragio, el "Carpathia" rescató a la pasajera que viajaba en segunda clase, a la niña que llevaba en brazos del bote en el que debió haber estado nuestro connacional, la subieron a bordo junto con 704 personas más, el resto pereció.

Después se supo que la niña no era hija de Elizabeth Ramell Nye, que la tomo aprovechando la confusión que reinaba en esos momentos de apremio, y también, el mundo se dio cuenta que nadie la esperaba en Estados Unidos ya que era viuda. Estos datos salieron a la luz. La inglesa dos años después de la tragedia visitó a los padres de Manuel cumpliendo su palabra empeñada con nuestro paisano en el momento sin retorno. La caballerosidad del legislador mexicano le hizo perder la vida, sucumbió al embrujo de sus principios y de sus excelsos valores humanos que lo acompañaron hasta el último día de su existencia.

Recientemente el cabildo de la ciudad  de Hermosillo nombró héroe de la caballerosidad a Manuel Uruchurtu Rámirez a propuesta de Antonio Uruchurtu, nieto del "Regente de Hierro" Ernesto Uruchurtu Peralta y sobrino bisnieto de nuestro personaje. Para el 15 de abril de 2012 fecha en que se cumplirá el primer centenario del hundimiento ya se están haciendo los tramites correspondientes para que sea nombrado héroe nacional de la caballerosidad por la cámara de senadores, mínimo homenaje que se le puede brindar a este ser excepcional que perdió la vida mostrando al mundo el espíritu mexicano y dejando constancia para siempre de su monumental estatura humana.

                          Dr. Nicolás Avilés González

viernes, 30 de septiembre de 2011

LUPITA LA NOVIA DE CULIACÀN

         











                                           LUPITA LA NOVIA DE CULIACAN


 Mi primer encuentro con Lupita La novia de culiacán fue alguna de las pocas veces que mi padre me llevó a esa ciudad, estaba con el antebrazo derecho fracturado por lo que la visita obligada a un médico en esta localidad. Y aunque Costa Rica está cerca, parecía que estaba al otro lado del mundo, ya que entonces había problemas con la posibilidad de que coincidieran los tiempos con el trabajo de mi padre y muy poco dinero para hacerlo. Esta vez no había de otra y se hizo el esfuerzo.
El taxi en el que nos desplazábamos circulaba por la única avenida que cruza de norte a sur la ciudad, recuerdo pocos autos y que se encontraba despejada. El semáforo marcó luz roja justo frente a la catedral erigida en honor a San Miguel Arcángel, de pronto atraviesa frente a mis ojos una imagen fantasmagorica, era una mujer vestida de novia con ojos color miel, sobre su cabeza un velo de tul blanco que dejaba ver su cara huesuda, las cejas y la boca intensamente maquillada. Aquello fue  terrible para mi como niño, de momento creí que era un fantasma, un ánima en pena; me dio miedo. seguramente el taxista notó el tamaño de mis ojos ante la sorpresa, y me dijo- No tenga miedo Mi'jo, es la Lupita La novia de Culiacán. Mucho tiempo resonó en mis oídos "Lupita La novia de Culiacán".

Guadalupe Leyva Flores, caminaba a diario por las calles del centro en el viejo Culiacán portando su hermoso traje de novia. La encontrabas en la "Casa Grande", en "Almacenes Garcia", en la calle Hidalgo, en la Ángel Flores y en el pórtico de Catedral. No pocas veces la escuché gritar con voz en cuello solicitando una entrevista con el señor obispo, para que sirviera de intermediario entre ella y el Papa, con el objeto de revelarle el encargo que recibió de la virgen de Guadalupe para recuperar el tesoro de la Divina Providencia. Lo pedía con un a voz aguda. chillante tanto que taladraba mis oídos; la más de las veces emitía sonidos guturales inenteligibles y después se sumía en silencios prolongados.

Cuando pasaba por la calle Hidalgo frente al edificio donde cursaba mi bachillerato la tomaba del brazo y caminaba desde la calle Andrade y pidiendome a gritos- suéltame, suéltame- intentaba zafarse de mi brazo adolescente, ahí, en la calle Paliza lograba soltarse. La invitaba a que fuéramos a casarnos. Después avanzaba hacia catedral.
A esas horas se notaba fresca ya que sólo llevaba caminando dos cuadras desde el Hospital del Carmen que era su residencia.

La gente murmuraba que se había enloquecido ya que le mataron al novio al entrar a Catedral. Contaban que fue un tal Ernesto que era su enamorado eterno desde la adolescencia y nunca se lo confesó. El día que Jesús le pidió matrimonio y ella aceptó fue a comunicarle la buena nueva al amigo. Este no pudo ocultar su desasosiego por tan infausta noticia y enseguida se atrevió a decirle los sentimientos que guardaba para con ella. Lupita le contestó  que el amor que sentía por él era el mismo que se siente por un hermano. Y que ya había dado su palabra y que además lo invitaba como padrino de bodas, cosa que el joven aceptó de mala gana.

Pronto llegó la fecha de la ceremonia nupcial. En la puerta de Catedral la esperaban Ernesto y Jesús y muchos invitados, instantes después llegó Lupita acompañada de un séquito de amigos y familiares, venía vestida de blanco y se miraba preciosa. Al ver a Jesús esperándola en el quicio del Portón de Catedral se abalanzó hacia él y se fundió en un abrazo que selló con un apasionado beso en la boca. Los ojos de Ernesto despedían fuego; los celos y la rabia lo dominaron y de entre sus ropas sacó un revolver y sin más lo vació en el cuerpo de su amigo. Jesús cayó al suelo y al poco tiempo murió en brazos de su prometida. Viendo ésta escena de ternura, Ernesto no aguantó más, sus celos lo cegaron, e inmediatamente elevó su pistola pegándose un balazo en la cabeza muriendo al instante, su cuerpo cayó al lado de sus amigos. Lupita perdió el juicio y así a partir de ese momento trágico soportó vestida de novia durante más de treinta años el sofocante calor de los veranos en Sinaloa. Lo hizo hasta su muerte el 12 de mayo de 1982.
Ahora parece que camina por las calles del centro de culiacán, que en prolongados soliloquios platica con su novio y que aún ora por el tesoro de la Divina Providencia en el pórtico de la Catedral de Culiacán

                                  Dr. Nicolás Avilés González







lunes, 26 de septiembre de 2011

POEMA A CULIACÁN



                                

                                           Culiacán

                        vives en mí culiacán
                        porque sabes a arrayán
                        porque tu suelo es tomate
                        sangre, sudor, acicate
                        tu alborada zafiro
                        la vida un suspiro
                        y tus atardeceres granate

                        porque sabes a pitaya
                        porque eres cuna de mujer bonita
                        por tu Tamazula, por tu Humaya
                        por tus campos malaquitas
                        por tu suantuario, por Malvarde y
                        por tu lomita

                       por tus noches cocuyos
                       por tu musica de banda
                       por el murmullo de tus ríos
                       por que son tus mujeres capullos
                       anzuelo, tarraya, eres panga

                       Mango, ciruela, eres lichi
                       panocha, conserva, trapiche
                       un sonoro canto de cuichi

                       Vives en mí culiacán
                       porque sabes a arrayán
                       porque tu suelo es tomate
                       sangre, sudor, acicate
                       tu alborada zafiro
                       la vida un suspiro
                       y tus atardeceres granate

                                    Nicolás Avilés González


                     
                     

Culiacán

lunes, 22 de agosto de 2011

Se lo llevaron en vilo


Se lo llevaron en vilo...
muchachos...plebes, plebes quiero decirles
que no quiero que mi niño, mi bebé, mi chiquitito se muera.
No quiere vivir, ¡ya no quiere vivir plebes... tengo miedo que se me muera!
Cuatro hombres membrudos se lo llevaron en vilo, hombres de hierro que no entienden de duelos.
Lo hicieron con prisa, lo hicieron sin pena, con una premura que espanta hasta el cielo. Sólo una triste mirada y luego otra al suelo.
De sus flácidos labios cayeron pesadas palabras, mientras sus ojos hurgaban la nada.
Tan sólo recuerdo que dijo ¿ por qué mamá? dime que todo es un sueño. Se lo llevaron de prisa, su fé estaba muerta se la robaron las drogas ¡jamás me di cuenta!
No le veré por tres meses, eso que importa si me he pasado la vida sin verle
llegas... me voy; el trabajo lo exige,
"calienta la sopa, haber que te sirves, me voy hijo mío el trabajo lo exige"
Mi llanto es  de rabia, también de impotencia
¡Quisiera matar al que a mi hijo  vende la muerte! Está en esta esquina, está en la de enfrente, al otro lado del puente, está en todos lados  ¿a quién mato? maldita mi suerte
¡Plebes, plebes, plebes mi hijo se droga, plebes, plebes no quiero que mi chiquitito se muera. Se lo llevaron en vilo...
                        Para tí amiga con toda mi esperanza

                        Dr. Nicolás Avilés González

miércoles, 3 de agosto de 2011

Eldorado nuestro



La tribu Muisca habitó durante el siglo XVI en las riveras de la laguna de Guatavita a la llegada de los conquistadores europeos, este cuerpo de agua se localiza en el municipio de Sesquilé al norte de la cabecera que lleva el nombre del lago. Ésta comunidad se encuentra a cincuenta kilómetros de Bogotá, capital del hermano país de Colombia.
Cuenta la leyenda que los Muiscas para nombrar su nuevo cacique se adentraban en balsas al medio de la laguna, en una de ellas, desde luego que la más suntuosa, iba el que sería ungido. Lo acompañaban los sumos sacerdotes, detrás eran seguidos por una gran corte de principales. El evento iniciaba cuando el elegido se despojaba de su ropaje para ser aderezado con resinas vegetales todo con el fin de que se fijara a su piel el polvo de oro que luego los sacerdotes esparcían por toda su anatomía. Ya cubierto con este tamiz y al recibir los rayos del sol estos se reflejaban emitiendo un bello esplendor que deslumbraba a los que permanecían en sus balsas y también a los que en tierra firme desafiaban el calor para presenciar el trascendental evento en la vida social, espiritual y política de la comunidad. De aquí su nombre: El Dorado.
Después de ciertas alabanzas el caudillo se lanzaba al agua y regresaba a la embarcación hasta que no tenía brillo alguno encima, hasta que se había lavado todo. Esto significaba despojarse de la soberbia, la cual es mala compañera de los que mandan. Enseguida, a manera de ofrenda arrojaban objetos del mismo metal con el  fin de que la diosa de la laguna le diera la sabiduría necesaria para conducir acertadamente los destinos de la tribu. Estas piezas de oro macizo desaparecían inmediatamente de la superficie de las aguas e iban a parar al fondo de la laguna, profundidades que garantizarón su custodia durante siglos. Después de la ceremonia de la iniciación El Dorado o el nuevo soberano iniciaba su largo reinado.

El acto de recepción de poderes se sigue dando alrededor del planeta, sólo que de diferente manera, para nombrar al apóstol de Roma, se reunen los cardenales del mundo y después de deliberar durante varios días de cónclave terminan por dar la noticia con la aparición de humo blanco que sale de las chimeneas del Vaticano, enseguida se escucha el milenario Avemus Papa con lo que queda envestido el nuevo pontífice universal de la Iglesia católica. El objetivo es el mismo, lo que cambia son los métodos; los aborígenes de las tierras descubiertas por la corona española deban un valor simbólico al metal áureo; este no despertaba su codicia, aún no se convertía en el rey del universo para ellos, por lo que no tenía el  valor  material que después tomó y era por esto que lo lanzaban al agua. Los europeos lo veían con un interés diferente, para ellos el valor era material, monetario y por ningún motivo permitirían que se fuera al fondo del lago, es por eso que ya no existe El Dorado. Ya no se tira al agua.
El vaticano, lanza humo, el metal se lo quedan. En lo civil las transiciones se hacen a través de eventos suntuosos, emulando las que se hacían para instalar al nuevo faraón en Egipto, reyes en la Europa medieval, presidentes de las repúblicas que se formarón después de la revolución francesa, zares en la antigua Rusia y jeques en el Medio Oriente. Ahora lo usan de manera suntuosa o de respaldo monetario o simplemente lo embodegan.

Ésta manera de los Muiscas de nombrar a sus gobernantes pronto llegó a los oídos de los del viejo mundo, huestes que campeaban en éstas tierras vírgenes en busca del metal dorado, lo querían para llevarlo a su soberano y así lograr aprobación y favores. Los ejercitos de aventureros al mando del capitán español Gonzalo Jimenez de Quezada, lo buscaban con denuedo inusual y con tal de conseguirlo llegaban hasta la rapiña, ahí nació la leyenda de El Dorado.
Desde 1537 El Dorado se convirtió en un objetivo a alcanzar, seguramente al capitán Jimenez de Quezada no le quedo duda alguna de que lo encontrarían en otros lugares, y pronto se tornó en una obsesión el encontrarlo. Nació la búsqueda incesante, frenética de los sitios que avasallaban a sangre y fuego; buscaban otros Eldorado. Por lo mismo hoy no es raro que varios países tengan su Eldorado, veamos, en la provincia de Misiones de la república Argentina existe uno y fue fundado el 29 de septiembre de 1919 hoy se mantiene de la comercialización de productos de la madera. Tenemos otro Eldorado en el municipio de Sifontes, Venezuela que nació a finales del siglo XIX y está poblado por unos cinco mil habitantes, también encontramos otro Eldorado en el departamento de Mata, Colombia y emergió en el siglo XX, desde luego que los Estados Unidos cuenta con su Eldorado en el estado de Arkansas y los disfrutan más de veinte mil habitantes. Nuestro Eldorado es una población que vio la luz por vez primera en el atardecer del siglo XIX y en los albores del siglo XX por iniciativa de la familia Redo, especialmente por orden del líder del clan don Diego Redo; que decidió producir azúcar de caña en estas tierras vírgenes de el estado de Sinaloa.
Nuetro Eldorado está situado casi a la orilla del mar a 54 kilómetros de Culiacán capital de nuestro estado y se llega a través de un camino pavimentado en un tiempo de recorrido en automovil como de cuarenta y cinco minutos, al dejar ésta cinta asfáltica se continua con un boulevard que te introduce al pueblo y pasa justo al lado de las instalaciones del ingenio de azúcar para luego doblar hacia la izquierda y terminar en las calles retorcidas de ésta sindicatura. Cabe aclarar que si no dejas esta rúa, te pone de frente con una hermosa edificación de adornos sobrios y torres altas con cúpulas que buscar el cielo y difiera francamente de las que existen en el sur del país ya que éstas tienen formas tradicionales. Esta es diferente sin embargo no deja de ser atractiva. Desde luego, que si estás en en centro de la comunidad tuviste que haberte dado cuenta que a lado derecho de la misma calle se erige el motivo de la fundación de Eldorado, allá a principios de los mil novecientos tres en que empezó con su primera molienda de caña. Aún se encuentra en funciones y hasta la fecha en que lo escribo es sustento de muchas personas en la región, generando cientos de empleos directos e indirectos, ya que es alimentado por caña que se siembra en miles de hectáreas que se encuentran cerca de el casco de la ciudad. Eldorado está asentado en una región especial que difiere del clima algo más seco y caliente que predomina en toda la geografía sinaloense. Aquí es húmedo, tanto que permite el desarrollo de una vegetación selvática tropical, de tal manera que cuando lo visites podrás admirar de huanacaxtles, zalates, álamos gigantescos en cualesquier punto de la localidad. Este micro clima madura miles de toneladas de frutales como mango, ciruela, guanábana y a la litche. Fruta traída de China continental por la familia Redo, actualmente es fuente de ingresos muy considerables para muchos lugareños que con amor cuidan de sus huertos.
También te sorprenderá un medio de transporte que se niega a morir, las "Arañas" que surcan de manera lenta, pausada sus calles transportando a los lugareños hasta sus sitios de destino. El escuchar el continuo clack, clack de la espuelas del caballo contra el pavimento produce una sensación placentera que evoca tiempos serenos. Este sonido es una vieja reminiscencia que aún recorre las calles de Eldorado.
La cercanía del mar de Cortez le permite tener excelentes playas como las de Ponce, a las cuales se puede llegar en automovil a través de una carretera debidamente asfaltada. El viaje no dura más allá de un cuarto de hora. Su situación geográfica le permite tener producción de camarón de manera natural y artificial, que se cultiva en grandes extensiones de terrenos convertidos en granjas productoras de éste crustáceo que va a parar a las mesas de todo Sinaloa y de México entero.
Los cultivos, los huertos de mangos, aguacates, toronjas, naranjas, litchies y las granjas de camarón, den certidumbre al pueblo en estos tiempos en que se cierne la amenaza de cierre del ingenio, como le sucedió al ingenio Rosales de su vecina Costa Rica, que entre otras cosas fue por el ingreso de alta fructuosa y más recientemente azúcar refinada que llega a raudales de los Estados Unidos.
Eldorado, es una comunidad viva conformada por gente trabajadora, productiva, bullanguera, retozona, bailadora, alegre, amante de las carreras de caballo, de las peleas de gallos y de jalar la banda por las playas, pos su río San Lorenzo y de disfrutar de los bellos atardeceres en Ponce y en la Puntilla y las Arenitas. Hoy que están tratando de convertirse en el municipio número 19 de nuestro estado, espero lo logren, se lo merecen ¡ Y para orgullo de todos los de Sinaloa tenemos nuestro Eldorado!


Dr. Nicolás Avilés González