El proyecto federal de pueblos mágicos aparece en el año 2001 como propuesta de la Secretaría de Turismo con el objetivo fundamental de fomentar la afluencia de paseantes a muchas comunidades, que a pesar de tener que mostrar algo sensacional estaban casi en el abandono. Dichos pueblos deberían de poseer una arquitectura urbana basada en edificios construidos en la época colonial hasta el siglo XIX bien preservada. Además que sus espacios tuvieran bellezas naturales a sus alrededores para ofrecer turismo de aventura, una cultura propia que se mostrara en manifestaciones genuinas como danza, música y ceremonias propias de la región.
Se buscaba que el lugar generara un ambiente acogedor, único, mágico, que evocara reminiscencias que pudieran transportar a los visitantes nacionales y extranjeros a un pasado glorioso.
En toda la república hay pueblos que aún conservan la esencia de esas épocas; el vecino estado de Sonora tenemos a Álamos que nos muestra su gran teatro, recinto oficial del festival estatal de cultura. En Nayarit tenemos a la isla de mexcaltitán, lugar legendario donde se supone salieron los aztecas a fundar Tenochtitlán; San Luis Potosí con su misterioso Real de Catorce que fue abandonado al agotarse la producción de metales preciosos, pero desde tiempos inmemoriales representa la ruta del huichol en sus ceremonias sagradas. El estado de Jalisco no podía dejar de aportar estas joyas y para muestra Tequila, Tapalpa y siguiendo en el occidente la legendaria Cómala de Juan Rulfo en el estado de Colima y viajando hacia el bajío, Querétaro aporta el pueblo de Bernal donde el atractivo principal es la energía que emana su montaña. Guanajuato tiene para visitar Dolores Hidalgo donde el cura Miguel Hidalgo lanzó su proclama de independencia y no podemos olvidar el precioso pueblo de San Miguel de Allende; el el estado de Hidalgo, en la ruta de la montaña encontramos los Prismas Basálticos y la hacienda de San Miguel Regla y el mineral de El Chico; en Chiapas tenemos para el turismo nacional y mundial al precioso San Cristóbal de las Casas, lugar donde se juntan las diversas etnias de las comunidades que lo circundan, en un día de tianguis encontramos tzotziles, tzentales, tojolobanes, lacandones, dándonos un festín multicolor sin par; en Veracruz sobresale la tierra del músico poeta Agustín Lara, Tlacotalpan a la vera del río Papaloapan.
Calle típica de Cosalá
La tierra de la tambora también tiene lo suyo, así enclava en las estribaciones de la sierra madre muy cerca de los límites con el estado de Rango tenemos a Cosalá que aún hasta estas fechas le siguen estrayendo metales preciosos los hombres de la tierra y, queda el recuerdo de otros minerales ya extintos que alguna vez aportaron sus riquezas a la nación como Nuestra Señora y Guadalupe de los Reyes, pueblo, este último que muestra su auge a través de las construcciones majestuosas y su iglesia monumental. Hoy abandonadas casi en su totalidad.
la cabecera municipal de Cosalá con sus retorcidas callejuelas cubiertas con piedra bola del río invita a su pasado colonial, piedra que hace que los herrajes de cascos de las bestias de carga al caminar nos produzca un sentimiento especial. Sus edificaciones portentosas como el "Museo del Mineral" protegido por paredes de un metro de espesor son simplemente impresionantes. Frente al museo tenemos la catedral de Santa Úrsula, enclavada en el corazón del pueblo que le da un distintivo señorial.
Entre sus callejones corren leyendas, relatos que parecen salir desde el adobe con lo que están construidas la mayoría de su caserío, nos cuentan de, rebelde Tino Nevarez con su movimiento minero, del caudillo Eraclio Bernal, mártir del movimiento pre-revolucionario nacido en el Chaco, San Ignacio, pero que luchó en tierras del mineral de las "once mil virgenes"; y para los que les gusta el ciclismo de montaña y el manejo Off Road el municipio les ofrece la ruta de la presa Comedero que atrapa aguas dell río San Lorenzo. En este cuerpo de agua podrás disfrutar de los deportes acuáticos y con suerte disfrutarás de un buen filete de lobina negra. Aguas abajo se encuentra San José de las Bocas que aporta algo de la historia de la minería regional y además su "agua caliente", que dicen los lugareños que son medicinales y pueden curar el reumatismo. Hoy podemos admirar los socavones de las minas abandonadas.
Para los que gustar observar los vestigios pre-historicos, existen pinturas rupestres no muy lejos de la plazuela que está frente a la catedral, para los aficionados a la música de banda, seguramente a través de algún balcón de sus casonas escucharán la voz del "Trovador del Campo", Luis Pérez Meza, hijo prodigo del mineral. La cascada de Vado Hondo desde luego que refrescará tu cuerpo y sentirás el deleite de sus aguas al caer sobre tu espalda y de darte un chapuzón en sus múltiples fosas. Pero lo más interesante es que encontrarás siempre una sonrisa en los labios de sus habitantes y especialmente de sus hermosas mujeres.
Palacio de gobierno de El Fuerte
En el norte, rumbo a las estribaciones de la sierra madre y colindando con el municipio alteño de Choix, rodeado prácticamente de agua por las presas Josefa Ortiz de Dominguez, la Miguel Hidalgo y muy cerca de aquí la colosal Luis Donaldo Colosio, en honor al malogrado político sonorense de Magdalena de Kino, todas sobre el río Fuerte que viene de las lluvias y deshielos del vecino Estado de Chihuahua. Vasos donde se practica la pesca deportiva y sus aguas calman las sed de miles de hectáreas desde el Carrizo hasta el municipio de Guasave en el centro del estado, llamado a mucha honra el "Granero de México". Pues en este lugar le gustó al capitán español Francisco de Ibarra para fundarlo en 1563, caserío que poco tiempo después fue destruido por los tehuecos, ameritando la construción de una fortificación que resistiera los ataques, por lo que tomo el nombre de "El Fuerte" y en honor a los condes de Montesclaros. Desde entonces se denomina El Fuerte de Montesclaro. Ya emitida la primera constitución por allá en 1824 del México independiente se conformó el Estado de Occidente que abarcaba desde el sur de Arizona, sonora hasta sinaloa, siendo esta villa su capital. Por todo lo anterior conserva el olor a pueblo colonial, y por lo mismo está lleno de leyendas, como la de Alejandro Vega que emigró desde El Fuerte después de que perdió a María de la Luz Gaxiola su compañera y el negocio de la minería se le vino abajo, decidió ir a probar fortuna a la Alta California llevándose con él al niño Diego Vega Gaxiola que tiempo después este migrante sinaloense se convertiría en" El Zorro", un férreo defensor de sus paisanos en las tierras recién despojadas a México por el gobierno americano.
Es también lugar de nacimiento del General Plácido Vega que luchó contra su Alteza Serenísima, Antonio López de Santa Ana y además contra los invasores franceses en 1963 y el no menos importante el hijo de Charay, el recio General Rodolfo Fierro, segundo de a bordo del General Francisco Villa en la División del Norte.
Matachines en El Fuerte
El Fuerte ofrece a sus visitantes las casonas coloniales adornadas con bellos colores mexicanos, los petroglifos del Cerro de la Máscara que datan entre 800 y 2500 años y las sorprendentes danzas; Pascola, Venado y Matachines que bailan los yoremes en las festividades de semana santa. Orgullosamente poseemos dos pueblos mágicos en nuestro estado y esto es para celebrarlo, vamos pues a disfrutarlos ¡ Los invitamos!
Dr. Nicolás Avilés González
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