Este místico solía guarecerse del sol rabioso de mi tierra bajo la fronda de este árbol, pero, el párroco de la capilla lo segó y el barbudo desapareció
Un pequeño a su madre dice: -Mama, fíjate que me caí pa´arriba y me salí pa´dentro -¿Como le hiciste?- preguntó la señora -¡Fácil!- contestó el infante -¿Fácil?- replicó la Doña - Si mama... Estaba soñando. A menudo olvida el hombre soñar y con ello entume su mocedad, es necesaria la magia del niño para tornar las ilusiones en realidad